Tengo una vida tranquila y normal, cuando me dejan; como la de cualquiera.
Vivo con mi familia, me encanta disfrutar de ella. Tengo amigos que me hacen buena compañía y unos achaques que me van fastidiando bastante.
En mi todo prima el amor y el humor, pese a las dificultades, mi tozudez y esas personas que te ponen la zancadilla.
Pero algo cambia cuando traspaso esas puertas… La mezcla de olores pringan todo el ambiente creando una atmósfera que te transporta a diferentes lugares del mundo dependiendo del olor predominante en la zona.
Lo realmente extraño es la reacción que esto provoca en mi cuerpo, mi mente… Empieza por un latido seco y contundente en el corazón; seguidamente un hormigueo recorre cada uno de los rincones de mi diminuto cuerpo, y ¡BOOM! Dejo se ser esa señora entrañable, pacífica y algo insegura pero serena, para convertirme en un ser jovial, picarón, desbordando energía y positivismo. También consigo ser un personaje con un humor algo cruel para quien ataca sin consideración: se maquinan espontáneamente diferentes formas de venganza sutil en esta alocada cabeza. Siento que me admiran y que me envidian, que les gusto y que les disguto…. ¿Y qué más da? No consigo reprimirme.
A veces pienso que he creado un monstruo. Sobretodo los viernes al mediodía. Algo en mi interior hierve y me desdoblo: Victoria Hyde, dicen que me llamo.
Saliendo por la parte de atrás y bajando unas escarpadas escaleras de metal, las piernas empiezan a fallarme (malditas rodillas). Por mis venas noto que la sangre pierde velocidad y una nueva paz inunda mi mente: Dra. Vicky ha vuelto….. Recupero mi vida y dejo atrás esos momentos que me enriquecen pero que forman parte de mí y sólo de mí. Es mi escape y mi espacio. Donde libero tensiones libremente sin prejuicios ni prohibiciones. Allí nada es imposible. Es el yo con el que nací: mi Hyde antes de mi Vicky soñada.
Soy quien siempre quise ser: YO.
4 comentarios:
Todos tenemos dos caras, o tres, o cuatro, o cincuenta. Nadie es siempre el mismo sino que se comporta de manera diferente en función de onde esté, con quien esté o en qué posición se encuentre. Lo bueno es mantenerse siempre fiel, sea cual sea el escenario. Y a veces es muy difícil.
Totalmente deacuerdo contigo.
Lo importante es la esencia. Nuestra personalidad es cambiante como nuestra sociedad se trata de evolucionar y adaptarse
Pues un defecto mío es no comportarme según la circunstancia. Oye Peggy que miedo la Vicky Hide!!!!!
No te asustes Emma. No es peligrosa además es muy divertida y de buena compañía.
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